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Charlotte

8 Nov

Charlotte Salomon

Argumento

En esta novela Foenkinos narra la vida de Charlotte Salomon, pintora alemana que fue asesinada en Auschwitz en 1943 cuando sólo contaba 26 años de edad y estaba embarazada. Sabemos el final desde el principio, porque está inspirada en un personaje real pero lo que nos encontramos es más que nada producto de la ficción. Una recreación de lo que fue su vida con los pasos que el autor siguió para conocerla un poco mejor.

Sus padres formaban parte de la alta burguesía judeo-alemana. Su padre era un médico cirujano especialista en cáncer y profesor universitario. Y su madre una devota enfermera abrumada por una historia familiar de suicidios. Con el transcurso del tiempo, no podrá eludir el mismo impulso que se llevó a su hermana, la primera Charlotte.

Cuando Charlotte contaba con apenas 9 años de edad, su madre puso fin a su vida. Un hecho que su familia le oculta hasta la madurez por miedo a que esta maldición se siga perpetuando de madres a hijas.

Pasado el tiempo, dos hechos marcarán y mejorarán su vida, el matrimonio de su padre con la cantante de ópera Paula Lindberg Levi que la acoge con cariño ya desde su adolescencia. Y otro, las jornadas de pintura en la Academia de Artes de Berlín que la hacen merecedora de un primer premio que, por ser judía, le es denegado.

Cuadro de Charlotte Salomon

Más adelante con veintiún años se enamora perdidamente de Alfred Wolfsohn, profesor de canto y voz de su madrastra Paula. Él había sido diagnosticado con trastorno de estrés postraumático tras pasar por las trincheras de la Primera Guerra Mundial. No dejaba de oír los alaridos de los soldados agonizantes. Se curó a sí mismo gritando, vocalizando sonidos extremos y cantando. Tenía una filosofía que se inspiraba en el mito de Orfeo, en la idea de que había que descender hacia dentro de uno mismo, “hacia el inconsciente”, para crear. En concreto, había que verse a uno mismo en distintas escenas de la vida, en la infancia, junto al psicoanalista, junto al mar, etc., para rememorar. El uso de la voz era el modo por el que escapar de la muerte en vida: desde el silencio más absoluto, hasta el registro más amplio de las posibilidades vocales.

Pero la relación de Alfred no era exclusiva. Él le dejó muy claro desde el principio que ella no podía esperar nada, «Si me agobian, no puedo dar nada«, quería seguir sintiéndose libre.

Cuadro de Charlotte Salomon

La oleada de crueldad nazi la obliga a buscar refugio en el sur de Francia, por aquel entonces lugar seguro y donde vivían sus abuelos. Se va sin querer irse porque Alfred y su padre la obligan. Ella sigue muy enamorada y este amor le perseguirá hasta el final de sus días. Porque no lo volverá a ver.

Charlotte tenía 23 años. Al poco de estar allí, y tras escuchar en la radio que las tropas alemanas habían cruzado la frontera francesa, la abuela intenta suicidarse. Charlotte se afana en transmitirle el amor a la vida: “mira ahora, el sol está brillando”, le dice mientras le susurra el Himno de la alegría de Beethoven.

En medio de esta desesperación, el abuelo le revela a Charlotte el espantoso secreto de la familia materna. Su madre, su tía, y hasta un total de siete miembros se habían suicidado en el pasado. (La tía se había tirado a un lago, y la madre se había tirado por la ventana. Charlotte ante estas revelaciones “siente como si el mundo entero necesitase ser rehecho de nuevo”. La abuela lo consigue en el quinto intento.

Después Charlotte y su abuelo son deportados como “extranjeros enemigos” al campo de concentración de Gurs en los Pirineos. El abuelo es liberado por su avanzada edad, y Charlotte con él. Ambos regresan a la Costa Azul. Pero a su regreso la situación va cambiando y su abuelo empieza a tener comportamientos extraños con ella como el de querer compartir la cama.

En ese instante de angustia, escribe en tercera persona, “se encontró a sí misma confrontada a la pregunta de si suicidarse o emprender algo completamente loco y extraordinario”. Escoge lo segundo, y durante casi dos años seguidos, entre 1941 y 1942, pinta sin parar, todo el día. Deja al abuelo y se aloja en un hotel en el pueblo. Las paredes se llenan de pinturas. “La guerra se encarnizaba y me senté ahí junto al mar y miré hacia las profundidades del corazón de la humanidad”

Allí pintará durante dos años más de 1300 imágenes y cuadros que pasan revista a una época y a su vida; y allí será prisionera de los alemanes que la conducirán a los hornos con un embarazo de cinco meses.

Efemérides históricas

La foto de Grynszpan que acaba de ser encontrada en los archivos del Museo Judío de Viena

La mañana del lunes 7 de noviembre de 1938, un joven judío de origen polaco llamado Herschel Grynszpan irrumpió en la oficina de Ernst vom Rath, secretario de la embajada de Alemania en París, y le descerrajó varios tiros.

La muerte del diplomático dos días después se convirtió en el desencadenante directo de la noche de los Cristales Rotos , una serie de ataques y atentados a objetivos judíos que no solo dejó 91 muertos y 30.000 detenidos, sino que se convirtió en el punto de no retorno para el antisemitismo en Alemania y Austria.

Comentarios 

Cuadro de Charlotte Salomon

Charlotte es una novela ligera y fácil de leer. Escrito en frases cortas, versificadas, una debajo de la otra. Con esta forma de narrar, a pinceladas, acierta a plasmar la vida y las pinturas de una joven judía alemana que nació en el entorno de una guerra (abril 1917) y se apagó en los hornos de otra, en Auschwitz en 1943.

Muy original en su planteamiento. Es una historia de una judía muerta víctima del nazismo pero en ningún momento nos detalla su vida en Auschwitz. No da protagonismo a esta parte de la historia. Quiere que veamos al personaje viviendo una tragedia desde su nacimiento y a lo largo de su vida, por distintas razones.

Si terrible fue su muerte no menos lo fue su vida antes de la tragedia. Problemas mentales en la rama materna que desembocan en suicidios hacen que Charlotte se codee con la muerte desde niña y, quizás por eso, se convirtiera en una joven extraña, misteriosa y silenciosa.  Un día llevó a su médico sus dibujos y se los entregó diciendo: «Es toda mi vida».

El autor se sintió fascinado por esa vida y fue tras sus pasos en este mundo de la pintora para escribir una novela en la que él mismo es un personaje, haciendo las veces de narrador omnisciente.

¿En Vida? ¿O Teatro? Charlotte pinta con tres colores -rojo, amarillo y azul- y esboza una triple escena: los cabarets que recuerdan a Brecht; las marchas nazis en las calles de Berlín; y la lírica música de un Schubert. Magnífica galería que hoy se puede admirar en el Museo Judío de Amsterdam. Cuadros que bien se comparan con los de Matisse y Van Gogh.


Ahora os toca a vosotros:

¿Qué os ha parecido la novela? ¿os gustó esta forma de plantear la historia?

¿Que opináis del personaje de Charlotte? ¿y el de que el autor sea un personaje más de la historia?

¿Os ha conseguido transmitir algún sentimiento?

Espero vuestros comentarios.

Nota: El próximo miércoles, 13 de noviembre, presentaremos la siguiente lectura. Acordaros de devolver este ejemplar antes de recoger el siguiente en la Biblioteca Fórum. Espero que os de tiempo a todos a finalizarlo.

¡¡¡Nos leemos!!!

Antisemitismo y Hitler

28 Oct

Contexto histórico

El antisemitismo jugó un papel importante en el pensamiento de Adolf Hitler y la ideología nazi.

Pero el antisemitismo no es un invento de Hitler. Desde la Edad Media en Europa, los judíos fueron víctimas de discriminación y persecución, a menudo, por motivos religiosos. Los cristianos vieron la fe judía como una desviación que debía ser combatida. Los judíos fueron, a veces, obligados a convertirse, o se les prohibían ejercer ciertas profesiones.

En el siglo XIX, la religión desempeñó un papel menos importante. Y en su lugar, surgieron pensamientos acerca de las diferencias entre las razas y pueblos.  Así se originó la idea que los judíos pertenecían a otro pueblo diferente que, por ejemplo, los alemanes. Incluso si los judíos se convertían a la fe cristiana, continuaban siendo «diferentes» debido a su línea de sangre.

judíos en la Alemania nazi.

El origen del odio contra los judíos de Hitler es desconocido. Él describe su pensamiento como antisemita en «Mein Kampf»  (Mi lucha) como el resultado de una larga lucha personal. En el período en el cual él vive y trabaja como pintor en Viena (1908 – 1913), su aversión a todo judío se hizo realidad.  La mayoría de los historiadores opinan que Hitler ha inventado posteriormente esta declaración. De esta manera, podía lograr convencer a las personas que no creían hasta entonces en sus ideas.

Dos políticos austríacos tuvieron un efecto significativo sobre el pensamiento de Hitler. El primero, Georg Ritter von Schönerer (1842-1921), era un nacionalista alemán. Opinaba que las regiones de habla alemana austro-húngara debían unirse al imperio alemán. Según él, los judíos no podían ser ciudadanos alemanes plenos.

Del segundo, el alcalde de Viena Karl Lueger (1844-1910), Hitler aprendió como el antisemitismo y las reformas sociales podrían ser exitosas. En Mein Kampf (Mi Lucha) Hitler menciona a Lueger como «el alcalde alemán más grande de todos los tiempos». Cuando Hitler llega al poder en 1933, llevará a la práctica ideas similares.

Un momento decisivo para Hitler fue la Primera Guerra Mundial. Se alista como voluntario en 1914, en el ejército alemán, que junto a la monarquía austriaca, lucha contra Francia, Inglaterra y Rusia. Estuvo poco tiempo en la batalla pero obtuvo una condecoración por el coraje demostrado.

La derrota de Alemania fue para muchos alemanes, y también para Hitler, difícil de aceptar. En círculos conservadores nacionalistas y de derecha  aparece una teoría llamada «la puñalada en la espalda», según este mito inventado, Alemania no había perdido la guerra en el campo de batalla, sino en su propio terreno, por traición.  Los judíos, socialdemócratas y comunistas serían los culpables.

Los prejuicios sobre el papel de los judíos en esta guerra eran incorrectos. Una investigación realizada por el Gobierno de Alemania lo ha demostrado. Más de cien mil judíos alemanes y austríacos lucharon por su patria. Uno de ellos fue Otto Frank, quien en 1916, estuvo en la Batalla del Somme.

Después de la Primera Guerra Mundial reina el caos en Alemania. Ahora que el emperador alemán ha abdicado, comienzan levantamientos.  Los grupos de izquierda intentan llegar al poder en diferentes lugares. Así también en Munich donde durante una revolución de corta duración fue poclamada: «La República Popular de Baviera.” Esto provocó una reacción contraria por parte de la derecha, que terminó en un derramamiento de sangre. Estos eventos causan una gran impresión en Hitler.

En el ejército descubre su talento para la oratoria. Pronto el ejército lo puso a cargo de dictar cursos. Estos están destinados a los soldados para advertirles del peligro comunista y profundizar los sentimientos de nacionalismo. En esta función, Hitler conocerá al Partido Obrero Alemán, que posteriormente se convirtió en el NSDAP. Esto significa el comienzo de su carrera política.

Con el telón de fondo de la revolución y de la violencia, el antisemitismo de Hitler toma formas cada vez más radicales.

Ya en agosto de 1920 Hitler compara a los judíos con gérmenes. Afirma que no se puede ser capaz de combatir una enfermedad sin destruir su origen. En su opinión, la influencia de los judíos nunca desaparecerá si no desaparece entre nosotros su causante: el judío. Las ideas radicales abren el camino para el asesinato en masa de judíos en la década de 1940.

Hitler culpa a los judíos de todos los males en el mundo. Alemania está débil y en decadencia por la «influencia judía». Los judíos, según Hitler, pretenden dominar el mundo. Para lo cual habrían de utilizar todos los medios posibles, incluido el capitalismo. Aquí, Hitler utilizó los prejuicios existentes que relacionan a los judíos con el poder financiero y sus ganancias.

Hitler no permite interferencias de opositores a su pensamiento. El comunismo es, según él, una conspiración judía. Una gran parte de los dirigentes comunistas es judío. Sin embargo, sólo una pequeña parte de los judíos es comunista. En la guerra con la Unión Soviética, a partir de 1941, la idea del «comunismo Judío» generará terribles consecuencias. La población y los prisioneros de guerra son tratados de manera brutal por los alemanes.

Hitler ve el mundo como un lugar de lucha permanente entre los pueblos. Según él, existen razas inferiores y superiores. Los alemanes están entre los pueblos de razas superiores y los judíos. inferiores.  También tiene opiniones sobre otros pueblos. Así él ve al pueblo eslavo como inferior, destinado a ser dominado.

También piensa que el pueblo alemán solo puede ser fuerte, si su raza es «pura». Lo cual trae como consecuencia que las personas con enfermedades hereditarias sean consideradas perjudiciales para la raza. Entre ellos, se encuentran no solo personas con una discapacidad física o mental, sino también alcohólicos y criminales «incorregibles». Una vez que los nazis llegan al poder, esto acarrea como consecuencia la esterilización forzada y el asesinato de personas.

Nuestra próxima lectura: «Charlotte» de David Foenkinos

24 Oct

Vamos a continuar nuestras lecturas con el escritor francés David Foenkinos, muy conocido en España por ser el autor de «La delicadeza» (2009) cuya publicación supuso un gran boom literario en nuestro país y que como confirmó en una entrevista «España es el segundo país donde más se leyó después de Francia». La delicadeza  fue llevada en 2011 al cine por David y Stéphane Foenkinos e interpretada por Audrey Tautou y François Damiens.

En este momento vamos a enfrentarnos a otra obra del autor, «Charlotte», publicada en 2015 por Alfaguara y cuya traducción corre a cargo de María Teresa Gallego Urrutia y Amaya García Gallego. Una novela de ficción basada en un personaje real que vivió en Alemania y padeció los horrores del nazismo por ser judía.

La obra 

Charlotte Salomon, pintora alemana de origen judío, abandona Berlín tras una relación amorosa que dejará en ella una huella definitiva. Huyendo de los nazis, se refugia en el sur de Francia junto a sus abuelos, quienes custodian un secreto que Charlotte no debe conocer. Allí compone su fascinante autobiografía, una obra única que, ya acechada por el peligro, decide poner a buen recaudo en una maleta que entrega a su médico, a quien confiesa: «Es toda mi vida».

La historia de un destino trágico. La búsqueda de un escritor fascinado por una artista. Una novela que, como la obra de Charlotte Salomon, inventa una nueva forma de arte.

Con esta novela, Foenkinos fue galardonado en 2015 con los premios Renaudot y Goncourt des Lycéens.

El autor

Nació el 28 de octubre de 1974 en París. Es un escritor y músico francés reconocido internacionalmente por su producción literaria.

Estudió Humanidades en la Sorbonne mientras daba clases de guitarra y tocaba en un grupo de jazz. Publicó su primer libro con la casa Gallimard en el año 2002 y recibió el premio François-Muriac. Sin embargo, Inversion de l’idiotie no fue un éxito en ventas, por lo que no se tradujo a más idiomas. El periódico francés Le Figaro lo incluyó en el top cinco de los escritores más exitosos del año 2012.

a pesar de las numerosas críticas favorables y de la obtención del premio François-Muriac, la carrera literaria de Foenkinos no despegó hasta 2004, año en el que publicó El potencial erótico de mi mujer y obtuvo el prestigioso premio Roger-Nimier.

Sus dos grandes éxitos en ventas han sido La delicadeza y Charlotte. Sin embargo ha publicado varias novelas entre las que destacan: En caso de felicidadLos recuerdos¿Quién se acuerda de David Foenkinos?Estoy mucho mejorLos recuerdos y Lennon, un libro biográfico dedicado a la figura del famoso cantante e integrante de Los Beatles.


Calendario de lecturas:

Como no es una obra muy extensa, vamos a leerla entera y seguido. Creo que el tiempo es suficiente para que todos podáis hacerlo con calma:

  • Presentación de la novela: 24 de octubre 2019
  • Contextualización de la novela: 28 de octubre 2019
  • Comentarios finales: 8 de noviembre 2019

IMPORTANTE: Los que podéis pasar a recoger un ejemplar por la biblioteca Fórum tenéis que ir a partir del lunes 28 de octubre, porque tuvimos un problema con el transporte y todavía no han llegado. Os confirmaré, de todas formas, por correo electrónico, cuando estén preparados para evitar viajes en balde. ¡Siento mucho las molestias!

Cartas hacia el horror

5 Oct

«Paradero desconocido»

Está armada con la correspondencia que se cruzan Max y Martin desde 1932 hasta 1934.

El alemán Martin Schulse y el judío Max Eisenstein son amigos y trabajan juntos en una galería de arte en California. Los dos provienen de Alemania. Tienen cuarenta años y han vivido casi toda su vida en EE.UU. En 1932 Martin decide volver con su familia a Alemania, que la dejó siendo muy niño, para que sus hijos conozcan su patria y no pierdan su identidad.

La primera carta es de noviembre de 1932. La escribe Max. Felicita a su amigo por volver a Alemania. Se conmueve pensando en su país ya que no lo visita desde la infancia. Y escribe «llegas a una Alemania democrática, a una tierra profundamente culta, donde la preciosa libertad política está en sus comienzos».

Martin se instala en Munich y se sorprende del grado de pobreza que encuentra. Aunque saca partido con la compra de una gran casa y su finca. A pesar de la crisis que se vive en EE.UU después del Crack del 29, observa que en Alemania hay una crisis más aguda. Tras la I Guerra Mundial, y como país perdedor en la contienda, Alemania quedó en la mayor ruina económica.

Max, en cartas posteriores, le pide a Martin su dirección en Alemania. La quiere para que acoja a Griselle -su hermana- mientras está de gira por Alemania. A lo que Martin accede cariñosamente: «le convendrá saber que tiene aquí una casa a su disposición».

En la carta de enero de 1933 Max le pregunta a Martin por la figura de Hitler. No lo conoce pero está informado de que se está haciendo con el poder en Alemania y ha leído cosas terribles sobre él. Quiere saber la opinión de su leal amigo.

Martin contesta «creo que en muchos sentidos Hitler puede ser conveniente para Alemania. Pero no estoy seguro». Reconoce también, veladamente, que tomó el poder a la fuerza ya que «ni siquiera Hinderburg pueda quitarle el poder, puesto que se vio forzado a dárselo». Y empieza a darle una descripción que resulta como mínimo, inquietante: gran orador, fanático, ¿cuerdo?, rodeado de maleantes que se dedican al pillaje y a apalear judíos. A lo que Martin disculpa como que «son cosas sin mayor trascendencia» porque persiguen un fin mayor. En ese momento Hitler está vendiendo el «renacer» de Alemania, muy maltrecha desde la I Guerra Mundial, y con un peso en Europa insignificante. Para Martin y para la mayoría de los alemanes en ese momento ha nacido un nuevo líder, que les va a despojar de la miseria y de la vergüenza.

Martin se ha afiliado al partido de Hitler, el nacionalsocialismo y es funcionario del nuevo régimen. Como muchos otros, intenta sacar partido del poder emergente. En este momento sigue teniendo dudas sobre Hitler pero «en publico no expreso duda alguna». Reflexiona con su amigo: «¿es justo el fin?», «¿estamos intentando crear una sociedad mejor?» No lo tiene claro.

En mayo de 1933 Max angustiado por las noticias que le llegan, vuelve a pedirle a su amigo que le aclare más la situación. Incluso le han llegado rumores de un Pogromo atroz contra los judíos. Le dice que su hermana tiene pensado ir en otoño a Berlín y que quiere que, como buen amigo leal, le diga la verdad sobre la situación de su patria.

A partir de aquí,  estamos en julio de 1933 la situación da un primer giro radical, Martin ya no le escribe desde su domicilio. Ahora lo hace desde su banco para evitar la censura que ya reconoce que es muy estricta. Le pide que no le vuelva a enviar más cartas porque desde su puesto de funcionario no está bien visto que se escriba con un judío. Si necesita escribir algo, que le incluya unas letras en el cheque bancario de las obras de arte.

Intentando ser lo más sincero posible, Martin reconoce que aunque las medidas tomadas en su país no le gustaron al principio, ahora considera que son inevitables ya que «la raza judía es un dedo en la llaga para cualquier nación que le dé cobijo». Y que a Max lo ha querido «no por tu raza sino a pesar de ella». Añade que «los judíos son los chivos expiatorios universales» y a Hitler ya lo califica como «Amado Líder». ¿Os suena de algo? y lo más peligroso «purgamos los componentes más abyectos de nuestro torrente sanguíneo». El renacer de Alemania, la raza pura, la raza alemana… todo contenido en un mismo idealismo que por desgracia no nos queda tan lejano en el tiempo.

Perplejo ante semejante discurso, Max intenta que su amigo entré en razón. Cree realmente que Martin no ha cambiado sino que es cauto por la censura y se intenta proteger. No podría entender un cambio de pensamiento de esa magnitud. Lo podría entender en los alemanes que sobrevivieron a la Gran Guerra y tuvieron que sufrir miserias e injusticias, pero no de su amigo que vivió como un norteamericano de pensamiento liberal más.

Pero en agosto de 1933 Martin le asevera que no es un norteamericano liberal sino un «patriota alemán». Sigue a Hitler porque es un «hombre emprendedor», un hombre de acción. No cuestiona sus fines. «Sabe que son justos porque son vitales«. Y le pide que no le escriba más, que ya no tienen nada en común.

Entre septiembre y noviembre de ese mismo año, Max le escribe desesperado varias cartas seguidas para pedirle primero que proteja a su hermana, Griselle, que está en Berlín y después que la busque porque ya no recibe noticias de ella y cada vez que le manda una carta se la devuelven con el sello «Adresse unbekannt» (paradero desconocido).

Por fin, Martin le contesta en diciembre y comienza su carta con «¡Heil Hitler! Lamento tener que darte malas noticias. Tu hermana ha muerto.» Le reconoce que su hermana llegó hasta su puerta pidiéndole ayuda pero que se la denegó porque era perseguida por las tropas de asalto y la mataron instantes después. Le vuelve a pedir que no le escriba más, porque no quiere tener tratos con judíos salvo para «recibir el dinero».

A partir de este momento, se produce una ruptura y la novela vuelve a dar un giro de 360 grados. Es el momento de la venganza.

Comienza con un cablegrama en enero de 1934 enviado desde California por Max al domicilio particular de Martin y con tres cartas más donde da a entender que son familia y que Martin está planeando algo.

Martin, asustado, le escribe que por favor pare de enviarle cartas. Que se las han interceptado y que lo han llamado para explicar qué significan y le piden un código para descifrarlas. Lo han apartado del trabajo y ya nadie quiere ir a su casa de invitado. Le suplica que no continúe porque teme por su vida y por acabar en un campo de concentración. Apela a su vieja amistad para poder seguir con vida.

Pero Max continua. La mejor venganza es la que se sirve en plato frío. Así que dos cartas después, consigue su propósito, le devuelven la última carta con el sello alemán de «»Adresse unbekannt».


Análisis de la novela

Las novelas epistolares, aunque sean ficticias, nos acerca en mayor medida a los personajes, a su intimidad. Acceder a la correspondencia privada conlleva un grado de confesión y complicidad con el lector mayor que en las novelas en primera persona. Además aporta la sensación de inmediatez, que hace que asistamos a los acontecimientos al mismo tiempo que están sucediendo y por ello los hacen más impactantes.

El contenido es crudo. Asistimos a la ruptura de una amistad que en principio parecía inquebrantable. Pero la autora nos refleja el cambio en Martin de una forma sencilla, directa y sin ornamentos. Las cartas de Max son en su mayoría desesperadas y en cambio las de Martin tienen cada vez más ira, rabia y resentimiento. Quizá Martín sea, de los dos, el personaje mejor definido de la novela. En pocas cartas vemos su transformación radical y sus nuevos valores. Y sobre todo, como Hitler ha sido el detonante de su cambio. ¿Creéis que  ya existía en las capas más profundas de Martin ese poso racista y fascista que se rebeló una vez instalado en Alemania? ¿O se dejó llevar deslumbrado por el nuevo poder imperante? ¿Entendéis el comportamiento final de Max? él también se dejó arrastrar por la ira y la sed de venganza.

En muy pocas páginas, apenas ochenta, esta vibrante novela resume a la perfección la transformación ideológica que el nazismo operó en los alemanes y nos hace entender como el discurso de Hitler pudo ser interiorizado por millones de ciudadanos de a pie. En resumen, una aguda y escalofriante reflexión sobre lo fácil que es manipular a las personas, sobre todo en momentos de crisis. Una reflexión que también podríamos aplicar a nuestros días.


Ahora os toca a vosotros:

  • ¿Os ha gustado la novela?
  • ¿Logra en cierta medida hacer un reflejo de la sociedad que abrazó a un personaje como Hitler?
  • ¿Qué os ha parecido el desenlace?

El próximo lunes, 8 de octubre, presentaremos la siguiente lectura. Los que vayáis devolviendo «Paradero desconocido» en la Biblioteca Fórum podéis ir pidiendo la siguiente lectura para que no tengáis que ir dos veces.

¡Nos leemos!

El auge del nazismo

30 Sep

Contexto histórico

El ascenso al poder de Adolf Hitler comenzó en  en septiembre de 1919 en Alemania, cuando Hitler se unió al Partido Obrero Alemán (DAP). En 1920 cambió su nombre a Partido Nacionalsocialista Obrero Alemán (NSDAP), comúnmente denominado Partido Nazi.

Este partido político se formó y desarrolló durante la posguerra de la Primera Guerra Mundial, como partido antimarxista y opuesto al Tratado de Versalles y al gobierno democrático de posguerra de la República de Weimar. Defendía el nacionalismo extremo y el pangermanismo, así como el antisemitismo.

Puede considerarse que el ascenso de Hitler terminó en marzo de 1933, después de que el Reichstag adoptara la Ley de Concesión de Plenos Poderes de 1933. El 30 de enero de 1933 el presidente Paul von Hindenburg había nombrado a Hitler canciller tras una serie de elecciones parlamentarias y las consiguientes intrigas entre bastidores.

La ley de plenos poderes, si se aplicaba de forma despiadada y autoritaria, daba virtualmente a Hitler la capacidad de ejercer constitucionalmente a partir de ese momento un poder dictatorial y sin objeciones legales.

Hitler ascendió a un lugar prominente en los primeros años de existencia del partido. Siendo uno de los mejores oradores del partido, exigió a los otros miembros que lo hicieran líder, con la amenaza de abandonarlo. En parte se ayudó de su deseo de utilizar la violencia para avanzar en sus objetivos políticos y para reclutar miembros que compartieran este deseo.

El Putsch de Múnich, en noviembre de 1923, y la posterior publicación de su libro Mein Kampf («Mi lucha«) acercaron a Hitler a una audiencia más amplia. A partir de ahí, el partido entró en una lucha electoral en la que Hitler participó como orador y organizador,​ así como en acciones violentas y reyertas callejeras.

A finales de los años 20 y principios de los 30, los nazis consiguieron suficientes apoyos electorales para convertirse en el mayor partido político del Reichstag, y la combinación de agudeza política, capacidad de engaño y astucia de Hitler convirtió la mayoría simple del partido en un efectivo poder de gobierno en la debilitada República de Weimar de 1933.

El 24 de marzo de 1933 pidió al Reichstag que aprobara la Ley Habilitante que dio a Hitler plenos poderes «temporalmente». Esta ley le otorgaba la libertad de actuar sin consentimiento parlamentario e incluso sin limitaciones constitucionales.

La ley permitía a Hitler y a su gabinete gobernar por decreto de emergencia durante cuatro años, aunque Hindenberg seguía de presidente.Hitler comenzó inmediatamente a abolir poderes de los estados federados y puso en el punto de mira a partidos y organizaciones políticas. Con la excepción del nazi, los partidos fueron oficialmente ilegalizados el 14 de julio, y el Reichstag renunció a sus responsabilidades democráticas.

La ley no invadía los poderes del presidente y Hitler no alcanzaría su pleno poder dictatorial hasta la muerte de Hindenburg, en agosto de 1934.

Paradero desconocido

Novela corta, o relato, de precisión conmovedora, trágica, dolorosa… y de gozosa lectura. Está compuesta por la correspondencia que intercambian los dos protagonistas y todo en ella es relevante, los membretes, las firmas, lo que queda entre líneas, el tono, los silencios… es brevísima pero no importa, ha sido afilada como un escalpelo.

La novela transcurre entre 1932 y 1934, durante el auge del nazismo.

La inspiración para esta novela

El libro está inspirado en la transformación ideológica que sufrieron unos alemanes que regresaron a su país tras haber vivido en Estados Unidos. Eran cultos e inteligentes, pero no toleraban críticas a Hitler. En un viaje a California se negaron a saludar a un amigo judío con el que se cruzaron. «Qué los había llevado a ese grado de crueldad?«, se preguntó al presenciar esta escena la autora, Kressmann Taylor. Y escribió «Paradero desconocido«.

¡Espero que os guste!


Calendario de lecturas:

El próximo viernes, 5 de octubre, analizaremos el conjunto de la novela.

¡Nos leemos!

Nuestra próxima lectura: Paradero desconocido de Kressmann Taylor

28 Sep

Nuestra primera novela nos traslada a la época del nazismo de la mano de la escritora americana Kressmann Taylor.

Paradero desconocido

Fue publicada por primera vez en 1938 en la revista «Story» y después fue editada en forma de libro. Vendió 50.000 ejemplares en Estados Unidos entre los elogios de la crítica, pero el avance nazi lo convirtió en Europa en un libro prohibido primero, olvidado después, durante sesenta años.

La historia trata sobre la transformación ideológica de un alemán cuando regresa a su país y se encuentra con un entorno social, político y económico totalmente distinto al esperado.

El alemán Martin Schulse y el judío Max Eisenstein son amigos y trabajan juntos en el mercado de obras de arte en California. En 1932 Martin decide volver a Alemania. Empieza, a partir de ese momento, un intercambio de cartas en las que enseguida se descubre, a través de los detalles de su relación profesional y personal, la sombra de la situación política de Alemania.

Es una novela epistolar que muchos autores consideran «La mejor denuncia contra el nazismo que se ha escrito nunca». Es corta y original.

Es importante destacar que en ese momento la presencia de Hitler no parecía inquietar mayormente a los gobierno de Europa y América. En septiembre de 1938, después de ocho días de festejos nazis en Nuremberg, el embajador de Francia en Alemania comentaba «la ciudad del Santo Imperio, habitada por el fantasma de Wagner, se ha convertido en el lugar donde la reflexión y el sentimiento se juntan en un culto al recuerdo del pasado y de las grandes ambiciones del futuro». Y una de esas ambiciones iba a ser París, pocos años después.

El texto de Kressmann denunciaba lo que en esos momentos sucedía en Alemania y preanunciaba el comienzo de la Segunda Guerra Mundial.

«Paradero desconocido» fue reeditado en 1995 con motivo del cincuenta aniversario de la liberación de los campos de exterminio. En 1999 un editor francés lo convirtió en un éxito de ventas. Y después del francés el libro fue traducido al italiano, al catalán, al alemán, al noruego, al sueco, al portugués…

Kressmann Taylor

Autora estadounidense, nació en Portland (Oregón) en 1903 y murió en julio de 1996.

Kressmann Taylor es el pseudónimo de Kathrine Taylor. Aceptó cambiarse de nombre porque su editor y su marido la convencieron de que la historia «era demasiado dura para aparecer firmada por una mujer«. La autora decidió mantener esta fórmula durante toda su carrera.

Estudió en la Universidad de Oregón y trabajó en publicidad. A finales de los años 40 comenzó a dar clases de Periodismo y Escritura creativa en Gettysburg College, hasta que se jubiló en 1966 y se mudó a Florencia.

A «Paradero desconocido» siguió una segunda novela relacionada con el nazismo, «Día sin retorno», así como «Diary of Florence in Flood», obra en la que relata sus experiencias en Florencia durante la terrible inundación que padeció la zona en 1966.


Calendario de lecturas:

  • 28 de septiembre (viernes): publicación del post presentación de la novela.
  • 1 de octubre (lunes): publicación del post con el contexto histórico de la novela.
  • 5 de octubre (viernes): publicación del post final con la trama y los comentarios de la novela.

Al ser una novela muy corta, creo que estos plazos dan suficiente tiempo para buscar la lectura y leerla. Así el próximo viernes, 5, podemos empezar a comentarla entre todos.

¡Nos leemos!

Lora y Lisa

31 Ene

Nos adentramos de lleno en la historia. Ya hemos conocido una parte, la de Eva, y ahora nos toca seguir añadiendo dos piezas más al puzle:

Lora ( (Amantes amentes)

Jacques a diferencia de sus dos amigos, Marinov y Robert, no provenía de una familia burguesa acomodada. Gracias a su hermano consiguió estudiar y graduarse como Ingeniero de Minas. Durante el  periodo de entreguerras logró trabajar en una empresa donde era valorado y tratado como a un hijo. Esto terminó cuando se promulgaron las leyes antisemitas por las cuales «los judíos no podían ocupar puestos de responsabilidad ni cargos honoríficos» así que obligaron al empresario a despedirlo de forma inmediata.

Después las Brigadas de trabajo forzado se lo llevaron a Gonda Voda (un campo de concentración creado en 1941) para trabajar picando piedra en una cantera. En aquellos tiempos oscuros la gente se dividía entre «los que eran víctimas de la violencia, los que vivían en la inopia y los que directamente o indirectamente ejercían la violencia o trabajaban para ella». Desgraciadamente este división se da con más frecuencia de la deseada en muchas sociedades del siglo XXI ¿no pensáis lo mismo?.

Jacques se negaba a vivir en esas condiciones por ser judío, así que se unió a un grupo político, logró escaparse y vivir en la clandestinidad. Por su parte, Amalia  que era también de familia judía se cambió el apellido a los 21 años para no tener problemas y poder seguir estudiando en el Conservatorio de música. Se conocieron al salir del cine y se enamoraron, mientras él todavía seguía viviendo en la clandestinidad.

De su matrimonio nació Lora. La autora la describe como «una niña que desarrolló el instinto amoroso desde muy pronto». De pequeña jugaba con Yozhi y estaban muy unidos hasta que tras un incidente con un coche, éste la desilusionó.

Al igual que Eva, Lora vivía los acontecimientos de su época con mucha naturalidad y sin sobresaltos. Ayudaba que se sentía querida y protegida por su familia. Cuando las personas que habían estado en su vida desaparecían o se marchaban a otro país, simplemente no lo entendía y se entristecía.

Mas tarde emigró con sus padres a Israel y se instalaron en Tel Aviv. A su llegada tuvo que pasar una serie de pruebas que los judíos israelís hacían a los «olims» (emigrantes judíos a Israel) o colonos. Unas pruebas que les enseñaron a controlar y disimular sus sentimientos.  «A veces, pocas veces, la verdad, se preguntaba si le quedaba algún sentimiento o, mejor dicho, algún sentimiento íntimo». En ella predominaba sobre todo el sentido de la responsabilidad, que habían inculcado a todos los colonos.

Se licenció en Químicas y se casó con Yozhi que también había emigrado a Israel pero ¿estaba realmente enamorada de él?o ¿se casaba solo por la añoranza de un tiempo y lugares perdidos?, «poco tiempo después se casó con él sin pensárselo demasiado. Tenía la sensación de regresar a la calle de la imprenta y del taller de paraguas, a aquella infancia y adolescencia suyas tan queridas».

Pero su gran amor fue Víctor «el recuerdo de su primer amor era más intenso que los recuerdos que guardaba de su infancia en la calle de la imprenta». Y no había conseguido olvidarle a pesar de su matrimonio, sus estupendos hijos y sus logros laborales. Lo conoció cuando ella estaba en el último año de Instituto. Él era traductor de libros en inglés y tenía una casa en Kniázhevo ¿os suena? ¿casualidad? vivieron un amor clandestino, no en un plano de igualdad porque Víctor era diez años mayor que ella y era él el que llevaba las riendas de la relación. Su relación termina cuando su familia decide emigrar a Israel tras el incidente en el parque con los milicianos.

Muchos años después, tras la muerte de su marido en una mesa de operaciones, Lora vuelve a tener pesadillas con el recuerdo de Víctor«no podía liberarse de la sensación de que alguien se había aprovechado de ella para algo que era incapaz de determinar». Y se preguntaba «¿Qué había ocurrido realmente en aquel entonces?» y «¿Quién era Víctor?».

Lisa (Audentes fortuna iuvat)

Hija de Robert y  nieta del magnate Jules Calderón. Tenía 8 años cuando su padre murió y no le dijeron nunca las causas. Su madre murió de cáncer y de tristeza un año después. Se crió con su abuela. Era la mayor de las tres amigas. A raíz de esta desgracia se encerró en si misma y su vida se centró en tocar el piano.

Con algunos flashbacks volvemos a la infancia de Lisa en Bulgaria. Tenía ocho años y llevaba tres compartiendo su casa con otras dos familias más. Su madre vivía con miedo constante. Se sentían vigilados. Aún así Lisa consiguió desarrollar su pasión por el piano, recibiendo clases clandestinas en el desván de su casa. Las pagaba con chocolatinas que conseguía su padre de estraperlo. El descubrimiento de esta situación dio pié a un miembro de la familia con la que compartían piso de denunciarlo y Lisa temió que esto fuera lo que llevó a su padre a la cárcel. No sabía que su familia estaba ya vigilada y perseguida desde la época de su abuelo.

Se matriculó en el Conservatorio y a los dos años ganó un concurso cuyo premio era la participación en otro concurso de fama internacional que se celebraba en Alemania. Ganó el concurso y esa misma noche se fugó.

A partir de ahí su vida se dedicó exclusivamente al piano, a ser concertista. Se instaló primero en Colonia y después en Suiza, donde se casó con Jean-René, pero su matrimonio duró apenas cuatro años.

De todo se ocupaba Herbert «un hombre que no sólo era su representante y mánager, sino también el único amigo que ella tenía». Lo conoció en el concurso de Alemania y gracias a él, consiguió fugarse y no volver nunca más a Bulgaria. Su amabilidad y desvelos Lisa los interpretaba como un enamoramiento que había surgido en la entrega de premios por parte de él. Lisa tenía entonces 20 años. Herbert consiguió lanzar su carrera y que obtuviera muchos ingresos. La tenía siempre vigilada. Cada paso que daba tenía que comunicárselo. Esta situación a Lisa no le importaba demasiado porque lo consideraba su única familia. Pero cuando conoció a Jean-René y vio como le molestaba escapar a su control, se dio cuenta de la relación tóxica que mantenían y lo apartó a un lado.

¿Qué pensáis realmente de Herbert? ¿llegó a apreciar realmente a Lisa o sólo era un trabajo más?. El telegrama que envió a Berlín con la frase «la princesa se asustó» nos desvela ya todo un entramado de espionaje bien estructurado y lejano en el tiempo. Además, el hecho de que descubramos que Tomá Zagórov, íntimo amigo de Eva, está también implicado en el seguimiento y espionaje de personas ¿qué sentimiento os produce? y se dio cuenta que «era mentira que hubiera alcanzado la libertad al seguir a Herbert«. Esta circunstancia le hizo aceptar rápidamente la propuesta de matrimonio de Jean-René y así poder escapar de su control. ¿Qué pensáis de esto?

Ahora os toca a vosotros:

  • ¿Qué os han parecido estas dos partes para la resolución del puzzle?.
  • ¿Quién es «el guapo»?.
  • ¿Creéis que todos los personajes, salvo las tres amigas, son sospechosos de algo?
  • ¿Qué personaje os parece el más interesante?

Plazos:

Leeremos hasta el final de la novela. El próximo miércoles, 7 de febrero, publicaremos el último post de este libro.

¡Buena lectura!

EVA (amicus certus)

22 Ene

La novela comienza en el presente. En los años 90. Ha caído el Muro de Berlín y con él, el Telón de Acero. Nuestra protagonista, Eva Marínov, se encuentra en Nueva York en una misión importante: encontrar una dirección y una cuenta bancaria. En esto ha quedado con sus dos amigas de la infancia, Lisa y Lora.

En esta parte de la novela vamos a empezar a conocer parte de la historia. En este caso sólo desde el punto de vista de Eva. Cohen nos hace entrar en la historia sin seguir un hilo cronológico al uso. Empieza en el presente pero enseguida, mediante flashbacks, nos lleva al pasado y va saltando de unos momentos a otros, a través de los ojos de Eva.

Eva, al igual que sus dos amigases de familia judía y nació en Bulgaria en el periodo de entreguerras. Vivió todos los acontecimientos históricos de su país con más naturalidad de lo esperado, sin dramatismos, y sin saber hasta que punto le habían marcado su vida: primero las leyes antisemitas en el periodo de entreguerras y después, la llegada del comunismo.

Aún así, ¿os ha conseguido transmitir el ambiente de claustrofobia que se vivía? además de la desconfianza y la falta de intimidad a la que se vieron expuestos casi todos los protagonistas.

Recorriendo las calles de Nueva York rememora las vivencias de su infancia y su juventud en Bulgaria. Sus recuerdos empiezan en su niñez cuando vivía con su familia en una casa acomodada de un barrio céntrico de Sofía. Corrían los años 30 y aunque Bulgaria no pasaba por un buen momento económico (había perdido la Guerra) la familia de Eva gozaba de una posición económica desahogada. Recordaba a sus amigas, Lisa y Lora y a sus padres, que eran como tíos para ella, Robert y Jacques, y a Alexéi, otro íntimo amigo de su padre.

Siempre se recuerda la niñez con cariño, o casi siempre. La memoria suele ser selectiva y nos devuelve aquello que nos ha hecho feliz o que nos ha marcado para siempre.

A veces somos conscientes de los hechos que han marcado nuestras vidas y otras veces no, como vamos a comprobar en esta novela. A lo largo de toda la historia parece que el azar está siempre presente, pero comprobaremos más adelante si las casualidades realmente existen.

La misión que la trajo a Nueva York comenzó el 14 de abril de 1992 cuando el tío Alexéi aterrizó en el aeropuerto de Sofía después de una ausencia de 43 años y le desveló a Eva parte de la historia familiar que todavía desconocía: La fortuna de la familia Calderón, las leyes antisemitas durante el reinado del Zar Boris III, la creación del consorcio Alternus, el suicidio de Jules Calderon y su mujer, la llegada del comunismo, encarcelación de Robert y posterior ejecución.

Por fin Eva conoce las verdaderas causas de la partida de Alexéi de Bulgaria, el suicidio del abuelo de Lisa, de cómo mataron a Robert y el porqué. Y en definitiva, es consciente de los acontecimientos de su vida, de lo que creía o no quería creer y de como el punto de vista de sus recuerdos de la infancia y  juventud, se puede transformar.

Pero esta revelación sólo será una parte de la historia. A partir de ahí, busca y contacta con sus antiguas amigas, Lora y Lisa, y les revela lo que le contó Alexéi: que Alternus eran ellos «Jules Calderón hizo cuatro poderes notariales. Cada uno de los apoderados estaba autorizado a retirar como máximo un millón de dólares de las cuentas bancarias. Para sacar todos los fondos y volver a convertirlos en activos era necesario era necesario que se reunieran los cuatro apoderados» que daban nombre a Alternus, o sus descendientes:

                                            AL: Alexéi

                                            TE: Teodor Marínov

                                            R: Robert Calderon

                                            NUS: contable Núshkow

Eva tenía su poder y el de Alexéi,  ahora necesitaba reunir también el de Lisa y buscar el del contable Nushkov que se marchó del país al poco del suicidio de Jules Calderon y no dejó rastro.

Ahora ya sabemos lo que busca Eva en Nueva York: información sobre la cuenta bancaria de Alternus  e información de donde se puede encontrar el contable Nushlok para conseguir su poder notarial. Además, Lora le ha pedido que intente averiguar algo de su gran amor de juventud, Wayne.

Volver al pasado, le hizo desempolvar sus recuerdos por Víctor, su gran amor.  Con el vivió un romance apasionado. Lo conoció de casualidad cuando tenía 30 años en la casa de su gran amigo Tomá Zagórov. Esa misma noche ya vivieron una relación apasionada en su casa de Kniázhevo, donde él vivía. Desde el primer momento, nos desconcierta su actitud e incluso su amigo Tomá la intenta advertir «ten cuidado Eva. Víctor es un hombre interesante, pero no me fío de él. No sé lo que quiere en la vida». Aún así, Eva se deja llevar por su pasión y sus sentimientos.

¿Qué pensáis de Víctor a estas alturas de la novela? Eva ya nos desvela que desapareció un día de repente y que le dijeron que había muerto fuera del país. Aún así, cree verlo en Nueva York y sufre un pequeño desvanecimiento. No lo ha olvidado. ¿Vosotros que creéis?.

A través de Tomá contacta con un joven arquitecto también llamado Víctor que la va a ayudar en sus primeros días en la ciudad. ¿Casualidad?.

Ahora os toca a vosotros:

  • ¿Qué os ha parecido hasta aquí?.
  • ¿Os parece que Eva ha sido feliz?.
  • ¿Sospecháis que algún personaje no sea lo que aparenta?.
  • ¿Qué sentimientos os despierta vivir en una sociedad así?.

Plazos:

Leeremos hasta la página 279, final de la tercera parte «Lisa (Audentes fortuna iuvat)». El próximo miércoles, 29 de enero, publicaremos el siguiente post.

¡Buena lectura!

La estratagema: una novela sobre la lealtad ante la adversidad

15 Ene

«Amicus certus in re incerta cernitur»

Un amigo en la necesidad es un amigo de verdad (Ennio, citado por Cicerón)

La novela

Lo que nos narra es la historia de cuatro personajes y sus familias, tres mujeres y un hombre: Eva, Lora, Lisa y Víctor. Todos ellos nacidos en Bulgaria y atrapados en la  historia de este país desde el momento en que su zar, Boris III decide acercarse a la Alemania de Hitler y aplicar en su país las leyes antisemitas  que no permitían a los judíos cursar estudios superiores, desempeñar trabajos cualificados, tener propiedades, etc.

Es en ese momento, cuando el patriarca de la familia Calderón, poderosa familia judía y dueños de un banco, compañías financieras y de seguros e industrias varias, decide no dejar que le arrebaten lo que con tanto esfuerzo ha conseguido e idea un plan para poner a salvo toda su inmensa fortuna a través de un consorcio con base en el extranjero llamado Alternus, que agrupará todo lo que tiene y que dirigirá en la sombra su contable Nushkov y que contará además con la ayuda indispensable del padre de Eva, el abogado Marínov y el padre de Lora, Jacques. 

Aunque Jules Calderón consigue llevar a cabo su plan, no contaba con que el país caería en la órbita comunista y los nuevos gobernantes estarán ansiosos por conseguir localizar su fortuna oculta. Esta circunstancia tendrá graves consecuencias  para los descendientes de aquellos en los que recayó la responsabilidad de velar por la integridad de Alternus.

La estructura de la novela recuerda a la de «Cuatro hermanas» de Jetta Carleton, porque Cohen recurre a cuatro voces, las de Eva, Lora, Lisa y Víctor, que se corresponden con las cuatro partes en las que está dividida la novela. Cada uno de ellos nos contará la historia desde su punto de vista y con la información de la que disponen. Será solo al final, tras haberlos oído a todos, cuando se junten todas las piezas del puzle y nos permitan conocer la historia al completo.

Esta es una historia sobre la amistad y la lealtad de varias familias, los Calderón, los Marinov y los Levi, que sobrevive a todas las circunstancias.

Si queréis conocer más sobre esta obra, aquí tenéis un enlace a la entrevista que le hicieron en el programa de radio El Marcapáginas al editor Luis Solano con motivo de la publicación de la novela en El Asteroide.

Contexto histórico

La novela comienza en el periodo de entreguerras gobernada por el Zar Boris III que sucedió a su padre, el Zar Fernando I que tuvo que abdicar por llevar al país a la derrota en la I Guerra Mundial. El país estaba arruinado, al borde del caos y dividido entre los extremistas de derechas y de izquierdas.

En 1934, la depresión económica y los conflictos políticos llevaron a un golpe militar organizado y liderado por oficiales del Zveno, que instauraron un régimen dictatorial con idea de establecer una república. Boris recuperó el control el año siguiente y, para evitar una nueva crisis política, impuso al país una dictadura. A partir de este momento empezó a estrechar lazos con la Alemania nazi, aunque se consideraba un filántropo y pacifista.

Se intentó mantener neutral durante la II Guerra Mundial pero, en 1941, con el ejército alemán en la frontera búlgara, el monarca se vio obligado a alinearse con el Eje.  A pesar de la alianza formal, no participó militarmente en el conflicto y se negó a deportar a los judíos hacia Alemania.

Los judíos de Bulgaria

El 29 de diciembre de 1940, el gobierno creó el «Brannik», organización juvenil inspirada en las Juventudes Hitlerianas. Cuatro días antes, la Asamblea Nacional había aprobado la «Ley de Protección de la Nación», la primera medida antisemita, que afectaba a cerca de cincuenta mil judíos. A pesar de la rápida reacción popular contraria a la aprobación de la ley, esta entró en vigor el 13 de enero de 1941.

A partir de ese momento se creó una comisión de asuntos judíos, responsable en su inicio de aplicar restricciones a la población hebrea: toque de queda obligatorio, arresto domiciliario, racionamiento de alimentos y uso de la estrella amarilla en la ropa. Posteriormente, la comisión empezó a organizar la deportación de judíos hacia los campos de concentración

Gracias a las protestas populares y a las que se unieron distintas personalidades, la población búlgara consiguió que Boris se negara a las deportaciones de judíos. Tras la deportación de judíos que vivían en los territorios ocupados de Tracia y Macedonia, llegó el turno de los que vivían en Bulgaria. La población, indignada, protestó enérgicamente; muchas personalidades se movilizaron contra estas medidas y convencieron a Boris de negarse. Gracias a esa decisión, los judíos búlgaros pudieron escapar de los campos de concentración.

República Popular de Bulgaria

La República Popular de Bulgaria fue el nombre estatal oficial de Bulgaria entre 1946 y 1990, durante su periodo como Estado Socialista.

En medio de la II Guerra Mundial rebeldes antifascistas búlgaros del Frente de la Patria con ayuda del Ejército Rojo derrocan al régimen profascista y el nuevo gobierno declara la guerra a Alemania. Finalizada la Guerra hubo un referendum donde la población se mostró contraria a la monarquía.

En 1947 las tropas soviéticas se retiraron de Bulgaria y se consiguió aprobar la Constitución. la desestalinización emprendida por la Unión Soviética influyó en los demás países socialistas, incluida Bulgaria. Bajo el mandato de Zhivkov, la línea política exterior búlgara se caracterizó por la desentralización económica en el interior y en la apertura a los países capitalistas en el exterior.

A mediados de la década de 1980 Bulgaria sufrió una grave recesión económica. Las autoridades encauzaron el descontento provocado a una ola de nacionalismo agresivo contra la minoría turca, que representaba aproximadamente el 10% de la población. El factor decisivo para el cambio fue la nueva dirección política que había adoptado la Unión Soviética de Mijail Gorbachov.

Zhivkov dimitió en noviembre de 1989 y 1990 el PCB renunció a su control del poder y se introdujo el capitalismo.


Plazos:

Vamos a leer hasta la página 118, que se corresponde con el final del capítulo 4 de la segunda parte del libro «Lora (Amantes amentes)». El próximo lunes, 22 de enero, publicaremos el siguiente post relacionado con estas páginas para que podamos comentar entre todos la historia, dar nuestra opinión e ir profundizando poco a poco en la trama y en los personajes.

Hasta entonces, os animo a que vayáis reflejando en este post los comentarios sobre vuestras impresiones sobre esta obra, si os está gustando, si os parece amena y fácil de leer y cualquier otra cuestión relacionada con ella.

¡Buena lectura!

Nuestra próxima lectura: «La estratagema» de Léa Cohen

8 Ene

¡Feliz año 2018!

Vamos a comenzar el año con un nuevo libro y una nueva temática, «La estratagema» de la autora búlgara Léa Cohen. Publicada en el año 2006 y traducida directamente del búlgaro por Liliana Tabákova, es considerada por la crítica como una de las mejores novelas búlgaras de este siglo. Esta novela es un thriller que recorre medio siglo de la historia de Bulgaria. Está disponible en nuestro catálogo de las bibliotecas municipales de A Coruña.

La obra

«La estratagema» aborda el peso del reciente y dramático pasado de la historia contemporánea de Bulgaria. Se trata de un thriller bien estructurado en el que la protagonista principal, la periodista Eva Marínova, intenta desentrañar la historia de cuatro familias a partir de la caída del comunismo, cuando los exiliados regresaron a Bulgaria para reencontrarse con el pasado y saldar cuentas.

Eva se ve implicada en el destino truncado de un grupo de personas separadas por las leyes antisemitas del zar Boris III y por el régimen autoritario posterior a la II Guerra Mundial, entre ellos los Calderón, judíos de ascendencia serfadí y poderosos en la Bulgaria de los años treinta.

Estamos ante un testimonio más del ambiente políticamente caldeado que vivió Europa en los años 30 y después de la II Guerra Mundial. La novela recrea muy bien las historias familiares, contando de forma detallada las vidas de los padres y las circunstancias vitales que les hace tomar determinadas decisiones que condicionarán su vida y las de sus descendientes para siempre.

La intriga añade a la novela más acción e interés, aunque lo más sobresaliente de «la Estratagema» es como la autora muestra sin estridencias el ambiente represivo del régimen comunista búlgaro y su obsesivo control de las vidas privadas de aquellas personas que consideran sospechosas. Este ambiente, que queda todavía más en evidencia después de la caída del Muro de Berlín y la posterior evolución política de Bulgaria, condiciona los sentimientos de los personajes, marcados por la desconfianza y la infelicidad.

Una novela de misterio que nos acerca a la desconocida historia de Bulgaria del periodo de entreguerras y que nos lleva hasta la caída del muro de Berlín y su etapa posterior.

La autora

Léa Cohen, de familia judía, nació en 1942 en Sofía (Bulgaria). Estudió piano y musicología en Sofía y en Utrecht. Entre 1975 y 1979 fue directora de la filarmónica de Sofía.

Los cambios políticos de 1989, la caída del muro de Berlín, propiciaron una reorientación de su carrera hacia la política y la diplomacia, actividades que siempre ha compaginado con la escritura. De 1991 a 2001 fue embajadora de Bulgaria ante la Unión Europea y la OTAN.

Es autora de varios libros sobre musicología: «Paul Hindemith» (1967), «Lublomir Pipkov» (1969), «Monseieur Croche et Monsier Débussy» (1988).

Como escritora de ficción, ha publicado diez novelas y una obra de teatro, la más destacada de las cuales es «La estratagema» (2006), su cuarta novela y primera traducida al castellano, que fue nominada para el premio de la Mejor Novela búlgara 2006. Otras novelas de ficción de la autora son: «El perseguidor de sonidos» (2008), «El piano»«Adiós, Bruselas» (2012).

Actualmente vive entre La Chaux-de-Fonds (Suiza) y Sofía (Bulgaria).


Plazos

Para los que tenéis que recoger el libro: podéis recoger un ejemplar a partir de hoy, lunes 8 de enero, en la Biblioteca Fórum Metropolitano en horario de apertura al público de la Sala de adultos.

El próximo lunes, 15 de enero, se publicará el siguiente post donde se comenzará con el análisis y calendario de lecturas.

¡ESPERAMOS QUE OS GUSTE!

Todas las palabras que surgen de mi pluma son besos de muerte

19 Dic

This is Beirut… Foto en flickr de Thomas Leuthard. Algunos derechos reservados.

Estamos ya en el duodécimo día, es martes, 1 de mayo y quedan cinco días para que finalice la novela. Fray Basile lleva a Adam al laberinto del convento y caminando por él sus pensamientos se desvanecen y una sola pregunta aflora en su mente: ¿Cuál es la razón verdadera de mi regreso a este país tan querido cuyo nombre temo escribir? La respuesta es enigmática: Sólo he vuelto para coger flores. Y se me ocurrió que ese gesto que consiste en coger un flor y añadirla al ramo que tienes ya en la mano e incluso estrechas contra el corazón es el gesto más hermoso y más cruel a un tiempo, porque rinde homenaje a la flor mientras la mata […] ¿Había aprensión, un sentimiento de culpabilidad unido a la revelación de tantas cosas íntimas relacionadas con mis amigos, mi país y mi propia persona? El memorialista es un traidor para los suyos o, al menos, un enterrador. Todas las palabras que surgen de mi pluma son besos de muerte. Palabras misteriosas y pesimistas. Quizá un presentimiento de lo que va a ocurrir más adelante. Pero, a la vez, Adam se encuentra en paz. Serenidad, humildad, deseo de silencio, sentirse invencible… todo eso es lo que siente en el laberinto.

Naím es el primero en llegar al país y el encuentro con Semi y Adam es fraternal. Naím es un hombre alegre, positivo y afable, quizá contagiado por el espíritu de Brasil, el país donde vive. Mientras cenan y brindan por la felicidad de verse nuevo juntos después de un cuarto de siglo, se cuentan sus vidas a lo largo de todos esos años. Bueno, sólo Semi y Naím hablan, pues Adam, con su reserva habitual, les deja explayarse mientras les escucha que es lo que siempre se le ha dado mejor. La timidez y el pudor siempre le han podido. Al día siguiente visitan la antigua casa de Naím mientras continúan conversando sobre sus vidas y otros temas como, de nuevo, las religiones o sus ideas de juventud. Ideas que contenían el deseo de cambiar la sociedad, algo que, visto lo ocurrido en el mundo, ven ahora pueril. Se han hecho adultos y ya no les quedan más sueños.

A instancias de sus amigos, Adam por fin cuenta su historia, visita a su casa de la infancia incluida. Adam era un niño feliz, hijo único que vivía con sus padres en una hermosa y elegante casa, no en vano su padre era arquitecto y su madre decoradora. Todo se trastocó cuando tenía doce años y medio. Hasta entonces, esa casa era para mí el centro del mundo. En agosto de 1970 sus padres mueren en un accidente de avión. Arruinado, y deshecho, tiene que vender la casa e irse a vivir con sus abuelos. Para el niño Adam este hecho tan traumático será el condicionante de toda su vida. Se convierte en una persona reservada y una idea se instala en su ser para no abandonarle jamás: cuando más feliz eres todo puede desaparecer en un instante, por lo que, en los momentos en que, ya adulto, la felicidad se instala en su vida, por ejemplo con una relación amorosa, tiene que destruir esa felicidad antes de que desaparezca. Porque Adam no concibe que esa felicidad pueda durar. Así quedó de marcado. Además no le cuenta a nadie lo ocurrido en su infancia. Es su manera de resguardarse del dolor, así como tampoco ha visitado esa casa hasta ese mismo día en que también abre su corazón a sus amigos. No voy a contaros historias de paraíso perdido, pero eso es exactamente lo que siento. Un paraíso del que me expulsaron como a nuestro antepasado, mi homónimo. Pero no por un pecado, por un accidente.

A continuación viene una larga historia en la que Adam les narra la peculiar relación que estableció, de los diez a los doce años, con una enigmática vecina. Una hermosa mujer rubia, viuda e iraquí. La pasión de ambos por los libros les une y para Adam fue su iniciadora sobre todo en la historia, la arqueología y las biografías. Una persona fundamental en su vida que le influye tanto como para hacerse historiador, pero, a mi parecer, el autor se extiende demasiado en esta historia que viene a romper y a trivializar la emoción e intensidad de lo narrado anteriormente por Adam sobre sus padres y su infancia. La historia en sí no es tan interesante y la alarga demasiado haciendo que se vuelvan a encontrar en la actualidad. No sé qué opináis vosotros. En ese encuentro, Maalouf aprovecha de nuevo para verter opiniones, en boca de la mujer, sobre lo nefastas que son todas las revoluciones. Hay un poso de pesimismo en todas las reflexiones que se hacen en el libro, ¿no creéis?, en cómo la evolución de la historia no ha llevado más a que a calamidades y desastres. En nombre del progreso, de la justicia de la libertad, de la nación o de la religión, no dejan de embarcarnos en aventuras que concluyen en naufragios. Aun así, el autor, siempre deja una puerta abierta a la esperanza en un futuro mejor.

Desde mi punto de vista, esta parte final del libro decae bastante con respecto a lo anterior. Pareciera como si el autor ya hubiera dicho todo lo que tenía que decir y se limita a proseguir con los encuentros y la preparación de la reunión. Todo va encaminado a un final abrupto e inesperado que resuelve en muy pocas páginas. Hay diseminadas en esta parte algunas premoniciones, como la que he apuntado más arriba, sobre el final que le espera a Adam: es cierto que llevo en el nombre a la humanidad naciente, pero pertenezco a una humanidad en vías de extinción […] No seré el primero de un linaje, seré el último, el último de todos los míos, el depositario de sus penas acumuladas, de sus desilusiones y también de sus vergüenzas.

Antes de llegar a ese final, tiene lugar el encuentro entre Adam y Albert, y, una vez más, éste le cuenta su vida: lo que en realidad ocurrió con sus padres, qué ha sido de su vida en EEUU, le revela su condición homosexual, su entrañable relación con sus antiguos secuestradores a los que considera sus padres adoptivos… Asimismo, nos narra la llegada de Dolores y la cena que celebran en Le Code Civil, el antiguo restaurante en el que se reunían de jóvenes, todos los que allí se encuentran: Adam, Semi, Naím, Albert y Dolores. Ésta quiere saberlo todo acerca de su vida pasada: ¡Y ahora contádmelo todo! Cómo os conocisteis, qué os juntó y qué os separó durante tanto tiempo. De nuevo, ese regusto amargo sobre el tiempo que se ha ido pero, a la vez, teñido de esperanza: Con el tiempo acabas por perder las ilusiones. Pero vale más que no ocurra demasiado pronto. Porque, en caso contrario, también pierdes el valor para vivir. La cena continúa y Dolores les pregunta: ¿Por qué la fe ocupa tanto espacio en esta región del mundo? a lo que Naím contesta: el creyente, incluso en su laicidad, es Occidente, y el religioso hasta el ateísmo es Occidente. Aquí, en Levante, no nos preocupan las creencias, sino las filiaciones. Nuestras confesiones son tribus, nuestro afán religioso es una forma de nacionalismo... ¿Qué opináis?

Y ya, en el decimosexto y último día, llega ese final abrupto e inesperado, por lo menos para mí. En catorce rápidas páginas se resuelve y nos deja con una sensación de que quizás el autor no sabía bien cómo terminar o que se había cansado de escribir y había que terminar cuanto antes o ya lo había dicho todo y no tenía sentido contar esa reunión o… ¿Qué pensáis vosotros? Se admiten sugerencias. El capítulo comienza: ese día de mayo iba a ser el del reencuentro. Fue el de la postrera separación y la postrera dispersión. Un accidente acaba con la vida del chofer y de fray Basile y deja a Adam en coma. Cuando encuentran su libreta nos enteramos de que el hermoso párrafo con el que comienza el libro lo había escrito Adam unos días antes del accidente para leerlo al final de la reunión. Un texto de clausura y de adiós. Sabiendo esto, sus palabras cobran mayor significado. A pesar de la carga de pesimismo que contienen, el final es esperanzador: mi gran alegría es haber encontrado entre las aguas unos cuantos islotes de delicadeza levantina y de ternura serena. Y eso me proporciona otra vez, al menos de momento, un apetito nuevo por la vida, razones nuevas para luchar y quizá, incluso, un estremecimiento de esperanza. Pero, como dicen las últimas palabras del libro, todo queda en suspensión: Dolores, que lo ha trasladado en avión ambulancia a una clínica parisina y que no se aparta de la cabecera de su cama, prefiere decir que está en suspensión. “Como su país, como este planeta-añade-. En suspensión como todos nosotros.

Plazos
Disponéis de una semana larga para comentar esta última parte y todo el libro en general. Luego, se nos echan las fiestas encima y haremos una pequeña pausa para volver con un nuevo libro a comienzos de enero. Aunque pondré un post para felicitaros las navidades, me adelanto para desearos ¡Feliz Navidad y un maravilloso 2015!

Más vale equivocarse en la esperanza que acertar en la desesperación

12 Dic

Two religions. Foto en flickr de Dmytro Zagrebelnyy. Algunos derechos reservados.

Llegamos al octavo día de la estancia de Adam en el país levantino. Es viernes, 27 de abril. Estamos en el ecuador de la novela y los hechos continúan transcurriendo más o menos con la misma dinámica. Encuentros con los amigos, cartas que se van cruzando, conversaciones muy interesantes sobre los más diversos temas… La reunión se va fraguando y finalmente se adelanta para la semana siguiente. Van a estar casi todos: Adam, Semi, Tania, Albert, Naím, Ramez, Ramzi o fray Basile, Nidal, el hermano de Bilal, y algunas de sus mujeres.

Hay muchas conversaciones sobre la religión en esta parte porque además están representadas casi todas: Ramez y su mujer, Dunia, son musulmanes, Nidal se ha convertido en un islamista, fray Basile es católico, Naím es judío y los demás, aunque son cristianos, se muestran escépticos o alejados de la religión. No hay que olvidar que cuando ellos eran jóvenes, todas las religiones convivían en paz. Algo, que, en la actualidad, se ha perdido ya que se han extremado y enfrentado las posturas y la religión se ha convertido en algo omnipresente en los países árabes. De eso mismo habla Dunia cuando afirma: lo que me exaspera es este sistema de ahora de meter la religión en todas partes y de usarla para justificarlo todo […] Cada vez hay más personas para quienes la religión sustituye a la ética […] Algún día se cansará nuestra gente de una religión tan cargante y prescindirá de todo, de lo mejor y de lo peor.

Naím, por carta, le habla a Adam de una larga conversación que mantuvo con su padre sobre la situación de los judíos, especialmente en el mundo árabe: pronto no quedará ninguna comunidad judía en el mundo árabe […] ¿Hubo un solo momento en la historia del mundo árabe en que nos tratase alguien como a ciudadanos de pleno derecho? […] Si, recién concluidos los horrores nazis, no hubiera surgido este conflicto en torno a Palestina ¿no habría mejorado la suerte de los judíos en las sociedades árabes en vez de irse deteriorando? […] Nuestra suerte está echada desde mucho antes de que nacieras, e incluso desde mucho antes de que naciera yo […] El camino por el que han tirado los israelíes no me convence, pero no tengo alternativa que proponerles. Así que me voy lejos, me callo y rezo. Y Naím concluye: Estamos en la era de la mala fe y de los campos atrincherados. Bien seas judío, bien seas árabe, sólo puedes elegir ya entre odiar al otro u odiarte a ti mismo. Y, si tienes la desdicha de haber nacido como yo, árabe y judío al tiempo, entonces ya ni existes.

Igualmente Adam afirma que es ese conflicto el que impide a Occidente y al islam reconciliarse, es el que hace retroceder a la humanidad contemporánea hacia las crispaciones identitarias, hacia el fanatismo religioso […] es en primer término por ese conflicto por lo que la humanidad ha entrado en una fase de involución ética y no de progreso. Adam analiza el conflicto árabe-israelí, y el papel de occidente en él, abogando idealmente por el entendimiento, algo, que, por otro lado, ve casi imposible que pueda suceder.

En su encuentro con el integrista Nidal se vuelve a tocar el conflicto islam-occidente, pareciendo que ambos representaran a cada uno de esos mundos. Es un encuentro tenso y difícil lleno de reproches: lo que no quieres ver es que en Occidente todo cuanto proceda de nosotros se mira con hostilidad […] Desde hace siglos, existe una hostilidad sistemática hacia todo lo que procede de nosotros […] Desde su punto de vista, hagamos lo que hagamos, siempre lo hacemos mal. En esta conversación, Adam, el árabe cristiano que vive en Francia, se cuestiona en qué lado está él, llegando a la conclusión de que no pertenece a ninguno: para mí, esos dos universos rivales son a la vez “ellos” y “nosotros”. Nidal prosigue el ataque: la relación entre ellos y nosotros no es hoy en día igualitaria en absoluto. Hace cuatrocientos años que no invadimos países en Occidente; son siempre ellos los que nos invaden, los que nos imponen su ley, los que nos tienen sometidos, nos colonizan y nos humillan […] pero tú, historiador, y a quien preocupan la verdad y la objetividad, no te decantas ni por unos ni por otros. Adam le replica duramente preguntándole por qué no consiguieron impedir esa invasión y esa humillación: ¿Por qué somos incapaces de fabricar unas armas tan poderosas como las de Occidente? ¿Por qué ocurrió la revolución industrial en Europa y no aquí? ¿Por qué nos quedamos en el subdesarrollo, la vulnerabilidad y la dependencia? […] Al final no nos quedará más remedio que mirar de frente nuestra propia derrota, la gigantesca y clamorosa debacle histórica de esta civilización, de nuestra civilización […] Los vencidos siempre tienen tendencia a presentarse como víctimas inocentes pero tienen la culpa de que los hayan vencido.

Son muchas los temas que aquí se plantean, y sólo he esbozado algunos. ¿Qué opináis de estas diferentes posturas según sean judíos, cristianos, musulmanes, integristas u occidentalistas? Parece que todos les echan la culpa a los otros. La sensación que tengo al leer este libro es que Amin Maalouf plantea numerosos temas a través de las conversaciones que mantienen unos y otros pero que todas quedan abiertas, sin encontrar respuestas. Quizá es que no haya respuestas y es suficiente con plantearse las preguntas para que nos hagan pensar. Es un tema muy complejo y además a nosotros nos queda un poco lejos aunque nos interese. Pero el autor mantiene la esperanza, siempre ésta planea de fondo. Como afirma Adam: más vale equivocarse en la esperanza que acertar en la desesperación.

Para poner un poco de calma y paz interior a todo este conflictivo debate, esta cuarta parte termina con una visita de Adam a fray Basile, el antiguo ingeniero que se ha retirado a una comunidad religiosa en el campo. Visita que le sirve a Adam para, de nuevo la religión, plantearse cuál es su postura ante ésta: no soy adepto a ninguna religión y no siento necesidad de serlo, aunque no siente ninguna hostilidad hacia los símbolos de la fe. Tampoco se considera ateo. ¿Qué hay más allá? No lo sé. ¿Hay algo? No lo sé […] Me hallo entre la creencia y la incredulidad igual que me hallo entre mis dos patrias: tengo presente una, tengo presente otra, sin pertenecer a ninguna de las dos. Adam pasa una jornada con los monjes sintiéndose a gusto, la atmósfera que se respira es de paz y concordia. Es una comunidad católica, minoría en ese país: a quién pertenece a una minoría le apetece callar su diferencia y no sacarla a la luz o enarbolarla como un estandarte. Y fray Basile con sus palabras vuelve, de alguna manera, al tema que nos ocupa casi todo este post: Si todos los hombres son mortales, nosotros, los cristianos de Oriente, lo somos por partida doble. Una vez como individuos, y eso es decreto del Cielo; y otra en tanto en cuanto comunidades, en tanto en cuanto, como civilización, y en eso no pinta nada el Cielo, la culpa la tienen los hombres. Al autor le preocupa la pervivencia de los judíos, los católicos, los cristianos, todos minorías en esta parte del planeta, en un mundo fundamentalmente musulmán. Y no olvidemos que las guerras en el Líbano fueron mayoritariamente entre facciones cristianas y musulmanas.

Hay más temas y vicisitudes en esa parte que os las dejo a vosotros: la carta de Dolores; la evolución de la relación entre Semi y Adam, y la explicación que éste se da a sí mismo de por qué no quiere que se acabe mientras esté en su país; la historia de Semi y su familia; la visita a Tania y la incomodidad de Adam ante el cambio de su antigua amiga… Podéis comentar todo lo que queráis sobre ello y también sobre el tema política-religión que es en el que más me he extendido.

Plazos
Es el turno de vuestros comentarios. Espero que sean numerosos. Disponéis de una semana más o menos para ello. Mientras, continuaremos con la lectura de la cuarta y última parte a partir del capítulo Duodécimo día (pág. 413) hasta el final de la novela.